Vamos a conocer primero la historia de esta linda tierra
Potosí departamento sur occidental de Bolivia que se extiende por 118.218 km² de superficie. Limita al oeste con Chile, al norte con los departamentos de Oruro y Cochabamba, al este con Chuquisaca y Tarija, y al sur con Argentina. Está bordeado al oeste por el cierre montañoso de la cordillera Occidental boliviana, en donde sobresalen el volcán Ollagüe (5.863 m), el conjunto conocido como el Cerro de Tocorpuri (5.808 m) y el volcán Licancábur (5.930 m), en el extremo meridional. Al este limita con la cordillera de los Frailes y la de Chichas, ramales de la cordillera Oriental de los Andes. Al sur se alza la cordillera de Lípez, con los cerros Lípez (5.929 m) y Sonequera (5.855 m).
En el centro del territorio departamental se extiende una depresión ocupada por el salar de Uyuni, del que se extraen bórax y otras sales, actividad que ha dado lugar al asentamiento de varias poblaciones en el área aledaña. También han desempeñado este papel las minas de plomo de Huanchaca; Atocha se ha levantado al pie del pico de Chorolque (5.614 m), con minas de bismuto; Tupiza y Villazón, en el extremo sur, constituyen centros de wolframio y plomo, respectivamente; y Llallagua y Uncía son conocidas por su producción de estaño. La capital, Potosí, dispuso de la mina de plata más rica del mundo, cerro Rico, explotada por los españoles y hoy casi agotada. Las actividades agrícolas de subsistencia se centran en la agricultura típica de montaña, con cultivos de cebada y papas (patatas), así como en la cría de ganado ovino, vacuno y especialmente de camélidos andinos: la llama y la vicuña, utilizadas para la carga, y la alpaca, de la que se obtiene una lana de fibra más fina. Junto a la localidad de Río Mulatos se halla el segundo paso de ferrocarril más elevado del mundo, a 4.774 m de altitud. Población (1997), 118.218 habitantes.
Cerro Rico, cerro boliviano situado en el departamento de Potosí; simboliza la riqueza de esta región. Su nombre, Sumaj Orko, significa cerro magnífico y alude a la abundancia de plata contenida en este monte-mina. La primera veta de este metal fue descubierta por Diego Huallpa. El conquistador español Gonzalo Pizarro se adueñó del asentamiento minero levantado alrededor del cerro Rico, que dio lugar a la fundación de la ciudad de Potosí un año después, en 1546. En el cerro, en principio cubierto por árboles, arbustos y pastos, se abrieron unas 5.000 bocaminas y se construyeron numerosos túneles interiores que formaban un complejo laberinto. Pronto se reveló como la mina de plata más rica del mundo. Su explotación atrajo a muchos buscadores de oro y plata, así como a unos 8 millones de nativos (llamados mitayos) dispuestos a trabajar en las minas de Potosí por jornadas o mitas. Varias leyendas surgieron en torno al cerro Rico y a su explotación por los españoles. Hoy, se sigue trabajando en el cerro rico, cuando empezó el dinero no se quedó en esta tierra, así como hoy tampoco se queda. Potosí una ciudad rica, pero pobre, porque los más grandes se enriquecen a cuesta de muchos que mueren por sobrevivir. El cerro es por dentro como un hormiguero, pero de personas, muchos mueren por falta de oxígeno. Aún conociendo el riesgo que corren, siguen trabajando, cuando entran se arriesgan a n o volver a ver la luz del día nunca más, pero la necesidad obliga, son personas valientes, que no le tienen miedo a nada ni a nadie.
miércoles, 30 de julio de 2008
martes, 29 de julio de 2008
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